10 tips para cuando tenemos un cachorro en casa. (Lo que a mi me funcionó!)

Hoy Pampa cumple un año! Feliz cumpleaños para mi Pampuneta!!!

Hace tiempo que tengo ganas de contar mi experiencia con un cachorrito en casa pero por una razón u otra lo venía postergando. Creo que el día en el que Pampa cumple un año cae perfecto!
Hace casi 9 meses llegaba esta morocha sexy a casa. Hacía años que soñábamos con tener un perrito pero no lográbamos juntar el tiempo y la energía que un cachorro requiere.
Si les tengo que ser sincera, creo que una nunca está preparada para afrontar el trabajo y dedicación que lleva tener un cachorrito en casa. Muchísimo menos teniendo tres hijos, uno de ellos  bebe (en ese momento Isi era muy chiquito), una casa enorme, un trabajo y solo unas horitas de ayuda por semana.
Es realmente mucho el tiempo que requiere la movida perrito en casa. MUCHO.

Perdí la cuenta la cantidad de veces en las que con marido pensamos "en que estabas pensando" al meternos en este quilombo? Que amateurs! Ya teníamos la vida organizada y nos venimos a meter en este quilombo! Así, miles, millones de veces. Después viene Pampa, nos mira con esa carita de yo no fui, nos mueve la cola a una velocidad que creo que está para los records guinness y nos chupetea todos y se nos va el enojo y las dudas.

Hoy es mi compañera, viene conmigo buscar a los chicos al cole o cada vez que voy a un lugar apto para perros y en este momento, mientras escribo, está tirada a mis pies.
Los perros son una super compañía y una fuente inagotable de amor. Ni hablar de que es la mejor amiga de Isi y juegan increíblemente.

Hoy, con Pampa cumpliendo un año, podemos decir que estamos encaminados. Se sigue mandando cagadas, pero mucho menos que al principio. Sigue siendo una cachorra, sigue necesitando (y siempre lo hará) un montón de atención y dedicación pero en cantidades llevaderas.
Creo que esta "calma" se está debiendo a dos (o tres) cosas: Una educación estricta, el paso del tiempo y el cerco que pusimos que impide que se escape y la tiene más calmada (más abajo les cuento).

Vamos con mis tips (fueron una prueba y error y creo que estos fueron los que me ayudaron más).

1- Ser consistente con las ordenes. Que toda la familia se ponga de acuerdo en que puede y que no pude hacer el cachorro. Les doy ejemplos: Pampa no tiene autorizado subirse al sillón y a mi cama, pero a la cama de los chicos si. No la dejamos que nos salte encima (más abajo les cuento como se lo enseñamos. Lo aprendió en dos días!)

2- Cada cual tiene sus responsabilidades. Yo no quería que pasara lo que pasa siempre en las casas que básicamente consiste en que todos disfrutan del perro y la bol*da que se ocupa de lo más feo es la madre. No no señoras y señores, eso no iba a ocurrir acá! Cada uno tiene responsabilidades y se cumplen a rajatabla. Agustin (el madrugador de la casa) le da de comer a la mañana y le abre la puerta para que salga a hacer sus necesidades. Sofi le da de comer a la noche. En cuanto a levantar la caca de la perra, los chicos se turnan un mes cada uno. Marido la saca a pasear y yo me ocupo de limpiar adentro (pelos, cuando rompe cosas), de que nunca le falte la comida y de llevarla al veterinario.
Es importante crear una rutina y que los chicos sepan que eso es SU responsabilidad y crearles la costumbre.

3- Destinar un ambiente de la casa para el perro. Este es el lugar donde va a dormir. Ese lugar puede ser cerrado con puertas de las que se usan para los bebés (es lo que nosotros hicimos) y durante la noche, duerme ahí. Esto sirve sobre todo al principio, hasta que el perro aprende a aguantarse toda la noche sin hacer ni pipí ni caca. Poner la cucha en un rincón y mucho papel de diario. Para limpiar el pipí tengo un tip que se los cuento más abajo.

4- No darle de comer al perro mientras comen. Si hay algo que me saca son los perros muertos de hambre que no te dejan comer en paz, que te ponen la pata encima todo el tiempo para que les tires un pedazo de comida. Desde el día uno insistimos a los chicos en que no le den de comer a Pampa mientras comen. Con Isi es más difícil porque muchas veces se le cae la comida y todavía medio que hace lo que quiere, así que muchas veces terminamos por sacar a Pampa al jardín mientras comemos.

5- Llevar al perro con ustedes a todas partes. Esto hace (a mi entender) que un perro sea sociable y amistoso. Cuanto más acostumbrado está a los extraños, mejor se va a comportar con ellos.

6- Molestarla mientras come. Desde el día uno, que molesto a Pampa mientras come. Le tiro de las orejas, le meto la mano en la comida, se la saco de la boca, le tiro de la cola. Me vuelvo insoportable. Esto le enseña a que si alguna vez alguien la toca cuando está comiendo, no la agarre por sorpresa y gruña o muerda. Estamos de acuerdo en que pampa es una labradora y que son más buenas que el pan   pero hace muchos años tuve un rotweiler y le enseñé así, jamás hubo un problema mientras comía.

7- Usen la "tecnología". Hasta hace una semana, Pampa se escapaba a la casa del vecino. Se comía el alambrado y pasaba (perra atorranta) a cualquier hora. Mi vecino no estaba muy contento ya con la situación y nos dio un ultimatum para que solucionemos el problema. Esto además de tensión con el vecino generaba que si salíamos, la tuviéramos que dejar encerrada en casa para que no se escape.
Cuestión que compramos un "cerco eléctrico" que se usa con un collar que cuando trata de cruzar el perímetro primero le advierte con un ruido, después vibración y si se sigue acercando, le da una estimulación electroestática que es como si fuera electricidad pero en realidad de como cuando dos personas se tocan y "hacen chispas". No es electricidad. No niego que le hace doler (a nosotros los humanos nos "duele" cuando eso pasa) pero no es nocivo y es más el susto que otra cosa. Fue una sola la vez que se acercó y recibió la descarga. Nunca más se acercó a ese cerco! Un problema menos. Acá les dejo el link del que compramos nosotros. Es el mejor del mercado.

8- Cansar al perro todos los días. Nosotros no sacamos a Pampa a pasear todos los días ni cerca estamos de hacerlo. Simplemente no nos da la vida. Entonces lo que hago (generalmente soy yo la que se ocupa de eso) es cansarla en casa. Hacerla que gaste energía jugando. El típico te tiro la pelota y correla, tiramos de una soga, jugamos carreras o a las escondidas con los chicos.
Yo se que los labradores necesitan gastar energía y hago lo que puedo. También se que lo que más necesitan es amor y eso es lo que le sobra a Pampa. En un mundo ideal la sacaríamos a pasear todos los días pero no es nuestra realidad, así que hacemos lo que podemos!

9- Facilitarse la vida. No dejar cosas tiradas que no queramos que el perro se las coma. Es así. Los cachorros tomen TODO. Perdí la cuenta de la cantidad de cosas que Pampa se comió o rompió. Cosas insólitas y cosas obvias. Se comió plata, los anteojos de Sofi, incontables pares de zapatos y zapatillas, la mesa del jardín junto con sus banquitos, libros, millones de juguetes, una alfombra, tres colchoncitos de ella (ahora se jodió y duerme sobre una manta finita) y cientos de cosas más. La solución es simple: No dejar nada a su alcance, o al menos, lo menos posible. Ahora los chicos saben que sus zapatillas tienen que ir siempre en el placard o en altura. Santo remedio, no más zapatillas comidas.

10- Darle altas dosis de amor y mimos. Es todo lo que necesitan. Que los acaricien, que jueguen con ellos y que les demos amor.
Ah! Y cuando se vayan de sus casas, no se despidan. No digan chau, no les jueguen, no hagan nada más que abrir la puerta y salir de casa. Es impresionante como de esta manera, se portan mejor mientras no estamos en casa. Dicen que esto reduce la ansiedad por la separación.

Claramente hay un infinito de otros tips para compartir, pero no quiero extenderme mucho. Estos son los más importantes para mi! Si quieren agregar el suyo, es más que bienvenido en los comentarios acá abajo!

Antes de despedirme, dos cosas más.

• Para que no salte encima, lo que hicimos fue: Cada vez que ella nos saltaba, nos dábamos vuelta (dandole la espalda y diciendo un NO con determinación. Cuando venia hacia nosotros y no saltaba, la felicitábamos y la llenábamos de mimos. Cuando viene gente a casa, Pampa ya no les salta, pero al principio si lo hacía como demostración de cariño y pidiendo juego supongo. Lo que hacíamos es que antes de entrar la visita, le pedíamos que si Pampa le saltaba, se de vuelta y diga NO como les conté más arriba.

• Para limpiar el pipí y que no quede olor, yo limpiaba con bicarbonato de sodio y vinagre. Santo remedio. Nunca más hubo olor. Nunca usar amoniaco porque el olor los invita a volver a hacer pipí en ese lugar.

Espero que les sirvan estos tips! Y que si se copan, compartan este post y compartan sus experiencias! Cada perro es distinto y el tip que me sirve a mi, quizás no le sirve a otra y viceversa!

Les mando un beso enorme! Y feliz fin de semanaaaa!
Nosotros nos vamos mañana a Barcelona hasta el lunes.

Aprovecho para contarles que si están en Barcelona, nos vamos a juntar con otras 25 argentinas. La cita es a las 16hs. en la Barceloneta, sobre la playa donde está el edificio de "cubos". Cualquier cosa me escriben por Instagram y las agrego a un grupo que armamos (bueno, son dos porque en el primero no entraba más gente!).

Beso grande!